lunes, 20 de junio de 2011
y si el cambio dura para siempre?
martes, 7 de junio de 2011
Votando en el desierto…
Desolación. Pena. Tristeza. Ver que la gente se pierde en solo ilusiones de un náufrago en una isla. Salones vacios como el sentimiento que te da una elección como esta. No hay nadie más. Solo tú y la cola de la ilusión perdida por la tristeza de una votación que solo es para el olvido.
11 am. 5 de junio del 2011, día de la decisión más preocupada que podrá tener cualquier persona que piense vivir toda su vida en el Perú. No es pesimismo, tampoco pena, es pensar en el solo de trompeta que se cruza por la cabeza de todos los que acuden a votar al colegio Santo domingo el Apóstol, en el distrito de san Miguel. Caras de miedo mezclado con pasados tormentosos que no quieren vivir y futuros inciertos que no les da ninguna señal alentadora. Apresurados todos por ir lo más rápido posible y limpiar su mente, despojándose de esa penuria que es tener el poder en un tus manos por 5 segundos. Tu cuerpo se posa en una cuerda floja de un equilibrista de circo, y pide no caer y morir solo en pensar que solo están esos dos rostros que salen en la cartilla menos esperada de la historia. Miembros de mesa que viven el némesis de una cuidad de la furia.
Es la tercera vez que voto, contando la primera vuelta. Siempre me pregunté si de verdad era una fiesta electoral, pero al parecer esto es más bien una resaca de una fiesta que se habrá celebrado en otros tiempos. Velocistas que corren a meta, las mesas de votación, solo para poner lo que ya tienen pensado o no pagar las multas. Fui tranquilo, sabiendo por quien iba a votar, solo me preocupaba la gente que podía haber en la cola como la última vez. En la primera vuelta vi que había un localcito de comidas que ponía música a todo volumen y la gente saliendo de votar iba y le compraba causitas de a sol, menú de 6.50, chicha morada, y dulces limeños, al parecer esta suerte de local al paso pasó al olvido rápidamente casi 2 meses después. Nunca vi abierto ese portón negro, y tampoco nadie se quejaba de que no lo estuviera, estaban mas preocupados en ir a sus casas y ver el flash de las 4 de la tarde que en hacer otra cosa, lo mismo que la señora dueña del local, que muy astuta ella, sabía que no haría dinero, porque este no sería un domingo cualquiera. Este de verdad seria un domingo de resurrección.
jueves, 2 de junio de 2011
Y EL PREMIO VA PARA…
Nunca tuvo la oportunidad de ver un concurso. Eloy lamas Borja no supo cómo reaccionar y solo atinó a saltar y pedir gracias a Dios. No tenía un discurso preparado porque nunca imaginó ganar, y solo pensó en sus hijos y su esposa, en lo felices que serian, tras ganar el concurso organizado por la casa de Bellas Artes, en 2009.
La pintura es su arte de relajación. Después de su esposa y sus hijos está la pintura. Ama y vive de lo que le gusta. A puertas de las cuatro décadas, vivió uno de los momentos mas importantes de su vida. Desde muy niño, cuenta la historia viviente de su madre que él solía escaparse con sus amigos, pero no a jugar, sino a buscar libros, no para leerlos, sino para traerlos a casa y dibujar las caras que salían en portada. Nunca le gustó algo más que no sea pintar. Hasta que llegó la competencia, que hizo que su corazón se dividiera en dos, su esposa, Yolanda Aguirre. Desde los 16 años vive soportando y guardando los más de 200 cuadros que tiene de regalo por cada aniversario que tuvieron o cada día de los enamorados que celebraron. ‘’La conquisté pintando, y me iré pintándole’’.
Trabaja en la municipalidad de la Perla, en el Callao, desde 2010. Consiguió este trabajo, porque él iba a las casas de la zona y cobraba mantenimiento por el cuidado del inmenso mural, que él pintó, de John Lennon, en el parque que lleva el mismo nombre. Así se ganaba la vida hasta que un iluminado, de esos que escasean hoy en día en nuestro país, lo vió y le propuso la idea de trabajar para la municipalidad, con una paga fija y con la consigna de hacer pinturas de las que él quiera, que arreglen las paredes maltratadas por otros en el distrito. ‘’Fue para mí el trabajo soñado, me pagaban por pintar en el lugar que vivo’’. Con eso empezó a inscribir a sus hijos en un colegio mejor, su esposa no trabaja, y él tenia que velar por ellos, y que mejor pintando. A nadie se le ocurriría pintar un cuadro de una mesa llena de comida, en día de navidad, porque no tenían qué comer en casa, solo a los que aman la pintura.
Decisiones
Fue a participar. Estuvo mas que elegante. Todos lo miraron. Algunos se rieron. Para él era lo mejor, quizás para otros no tanto. Los nervios lo invadían mientras hablaban en la ceremonia. Llegan a la premiación final. ‘’Estábamos dos personas y yo, a uno ya lo habían eliminado, el nombre que dijeran ganaba’’. ‘’Pensaba en cómo regresaría a mi casa habiendo perdido’’. Eloy Lamas Borja, felicitaciones ha obtenido el primer puesto en el 1er concurso anual que organizan los estudiantes de Bellas Artes… Acérquese por favor. ‘’Fue la caminata mas bonita de mi vida’’. Todos lo aplaudieron y a la vez se sorprendían. Fue el hombre mas feliz del mundo. Le entregaron el reconocimiento y los 2500 soles. ‘’Fue la decisión mas importante que he tomado en mi vida’’. ‘’ La pintura siempre me ha traído felicidad’’. Sus hijos y su esposa lloraron y solo le pudieron decir, gracias por ser el mejor.
La vida continúa…